hay soles rotos,
en los suelos de habitaciones
contiguas,
con los deseos
de niñas inconclusas y hombres de fe,
testimonios
de la intolerante impaciencia
inalcanzables a los que nunca miran abajo
desconocidos para los cazadores de cielos
con rayos gélidos
y acciones incompletas,
con dolor de humedad.
silencio
ambiguo testigo
astro abandonado
castigo de olvido
hombre, escalera, pan. olvido
terreno de nadie
absurda fuente
déjame acariciarte